EL MUNDO SUTIL EN EL CHAMANISMO: CLAVES PARA UN CONOCIMIENTO SAGRADO
El ser humano desde su creación siempre ha ido en búsqueda de su evolución y de las respuestas significativas a los misterios de la vida. Sobre esta base, surge una sabiduría ancestral que se adentra en lo primigenio, lo numismático, lo sobrenatural, lo sagrado y lo profano, para develar su sentido más profundo y brindarnos las claves de nuestro recorrido por el mundo.
(¿PARA QUÉ SIRVEN LAS MEDICINAS ANCESTRALES?)
Es el chamanismo , un estadio espiritual, un conocimiento sagrado que propone a quienes lo conocen, el poder transitar ese mundo sutil que permanece oculto bajo el velo de lo material, y del que nos hemos desvinculado en la cultura Occidental, por considerarlo inaccesible en nuestra realidad física. Fenómenos como la clarividencia, la telepatía, la premonición, la psicoquinesia, la sinestesia o la percepción ampliada, forman parte de las experiencias extrasensoriales que nos ofrece este mundo de realidad no causal, del que no accedemos desde lo racional como estamos acostumbrados.
(MITOS Y CREENCIAS QUE NOS ALEJAN DE LA EXPERIENCIA DEL RAPÉ)
Para acceder a esta comprensión que proviene del universo cósmico, es necesario que nos vinculemos a este mundo desde la amplitud de consciencia. Algo que para el chamanismo puede ser denominado como Conciencia superior, es decir, el íntimo convencimiento de que lo misterioso y sobrenatural forma parte de nuestra naturaleza, así como una isla lo es al mar. Es la certeza de que existe un sustrato especial donde el mundo de los espíritus habita de forma natural y está integrado con el Todo que somos.
(RAPÉS VISIONARIOS: UNA MANERA DE INTEGRAR EXPERIENCIAS Y CONECTAR CON EL TODO)
Este reino está formado por tres zonas: el mundo inferior o submundo, un mundo medio o terreno (terrenal) y un mundo superior o Celeste. Cada uno de ellos están divididos en niveles transitables abiertos para el contacto de los seres humanos y espíritus, quienes pueden ir de una zona cósmica a otra, conectando unas regiones con otras y que suele representarse a partir de la imagen del Árbol cósmico o Montaña Sagrada.
Pero para hacerlo, es necesario transitar un viaje visionario. Y es allí donde el chamanismo funge como intermediador para conectar ambos mundos: el reino material y el mundo sutil de lo sobrenatural. A partir de ritos, ceremonias y sustancias poderosas que la misma naturaleza en su infinita bondad nos otorga, es posible acudir al encuentro de lo espiritual y recibir los mensajes significativos que tienen para nosotros.
(¿QUÉ SON LAS CEREMONIAS DE RAPÉ?)
En esta travesía levítica también es posible encontrar la iniciación a los periplos del alma. Un mundo en el que las enfermedades no existen, ni el horror de la muerte o el dolor de las pérdidas. Es el acceso a un conocimiento secreto, desconocido, que conlleva a una separación de lo que tenemos preconcebido, pero que al final del viaje es reparador, purificador y profundamente transformador.
